Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2022

Angela Becerra. La pasión literaria.

Imagen
 La pasión literaria.   En definitiva esta pasión mía por la literatura, por la lectura en especial pero, también por el oficio de escribir, crece y fructifica cada día. Y es que cada día, encuentra uno inefables tesoros en medio de ese trasegar por los vericuetos que, nos proponen las páginas leídas por vez primera o incluso releídas, muchas veces en algunos casos, pues nos brindan cada vez más emociones.   Aprecio y respeto profundamente a los hacedores inmersos en estas lides, que encuentran su voz y desarrollan su labor con denuedo y constancia, hasta lograr un dominio del lenguaje que, les permite expresar con claridad y belleza, las ideas, su pensamiento y las sensaciones derivadas de afrontar una historia, encontrada a la deriva en el maremágnum de nuestro devenir y, decidirse a contarla. En muchas ocasiones ardua, la brega siempre termina dándonos satisfacción personal e incluso placer y deleite a nuestros semejantes.   Para la muestra un botón, para decirlo de manera coloquial

Gabriel Garcia Marquez. El nunca bien ponderado...

  El nunca bien ponderado...  La expresión me gusta, de forma definitiva, expresa muy cerca, el grado de admiración que podamos tener por alguien influyente en nuestro modo ser y de pensar.   El oficio de escribir, él, en su inefable sabiduría lo definió como un inapelable delirio. Muchos podrán reconocerlo en estas palabras de uno de sus discursos, cuando, un poco a regañadientes, recibió el premio Nobel. Precedido por muy pocos en la región, el primer colombiano en recibirlo, sigue siendo poco más que admirado, por sus coterráneos. Más por un imperdonable desconocimiento de su valía personal que, por falta de reconocimiento de su obra. Yo mismo me declaro deudor en este sentido y, me impongo en este momento subsanar esta falencia. Será una tarea ingente, pero por su naturaleza muy interesante y con seguridad satisfactoria. Con esta primera nota comienzo, por donde debo, con lo que tengo presente en mi consciencia al respecto.   Como poeta, Gabriel García Márquez, por que en esencia e